El síndrome de Burnout es en el resultado de un proceso de estrés crónico laboral y organizacional que termina en un estado de agotamiento emocional y de fatiga desmotivante para las tareas laborales.

Se diferencia del estrés como riesgo psicosocial en sus mayores efectos sobre el agota- miento emocional, más que en el físico, y su consiguiente pérdida de motivación laboral.

Este síndrome fue estudiado por Jackson y Maslach, quienes en 1986 lo definieron como “un síndrome de fatiga emocional, despersonalización y de un enriquecimiento personal reducido, que puede producirse entre individuos que trabajan en contacto directo con clientes o pacientes”. De hecho, la mayor incidencia se da entre profesionales sanitarios y de la enseñanza en la franja de edad de 30 a 50 años.

Las características que definen, por tanto, el síndrome de burnout y que permiten su identificación las podemos describir de la siguiente manera:

  • Agotamiento emocional: fatiga, pérdida de energía con disminución de los recursos emocionales.
  • Despersonalización: actitudes de insensibilidad y deshumanización, consistentes en actitudes negativas e incluso, a veces, de cinismo, hacia los receptores del servicio prestado por el trabajador.
  • Baja realización personal: frustración por  la forma de realizar el propio trabajo y los resultados conseguidos con él, que tienden a evaluarse de manera negativa y como una insuficiencia profesional propia.

FACTORES DESENCADENANTES

El origen reside en el entorno laboral y en las condiciones de trabajo. si bien, como es lógico, dependiendo de algunas variables de personalidad, sociodemográficas y/o individuales, pueden darse evoluciones diferentes en el desarrollo del burnout.

La exposición a factores de riesgo psicosocial, a fuentes de estrés en dosis nocivas y, en concreto, a variables como carga de trabajo, falta de control y autonomía, ambigüedad y conflicto de rol, malas relaciones en el trabajo , falta de apoyo social, falta de formación para desempeñar tareas, descompensación entre responsabilidad-recursos, etc., cuando se produce en trabajos en los que su contenido tiene unas demandas emocionales importantes y de prestación de servicios humanos, puede dar lugar a la aparición de un proceso de estrés crónico que desemboque en un daño para la salud del trabajador, el burnout.

Cualquier profesional con una gran vocación, que se entrega a su profesión, con altos niveles de idealismo profesional y que desarrolla su trabajo centrado en el trato hacia los demás puede desarrollar burnout. Sin embargo, ahí no residen las causas de las nocivas consecuencias para la salud que tiene desarrollar el burnout, sino que, además de factores individuales, son factores organizativos, de las condiciones de trabajo y de exigencias del servicio en las interacciones las que desencadenan e incrementan el daño a la salud si no se protege al individuo, entre otros,

FACTORES DE LA ORGANIZACIÓN

  • Estructura de la organización muy jerarquizada y rígida
  • Falta de apoyo instrumental
  • Exceso de burocracia
  • Falta de participación de los trabajadores
  • Falta de coordinación entre departamentos
  • Falta de formación
  • Falta de refuerzo o recompensa
  • Falta de desarrollo profesional
  • Relaciones conflictivas
  • Estilo de dirección inadecuado
  • Desigualdad percibida en la gestión de los RRHH

FACTORES DE LAS CONDICIONES DE TRABAJO

  • Sobrecarga de trabajo, exigencias emocionales
  • Descompensación entre responsabilidad y autonomía
  • Falta de tiempo para atender al usuario/cliente/alumno
  • Disfunción de rol
  • Carga emocional excesiva
  • Falta de control de los resultados de la tarea
  • Falta de apoyo social
  • Poca autonomía decisional
  • Estresores económicos
  • Insatisfacción en el trabajo

FACTORES DE LAS RELACIONES SOCIALES

  • Trato con usuarios difíciles o problemáticos
  • Relaciones conflictivas con clientes
  • Relaciones tensas, competitivas, con conflictos con compañeros y con usuarios
  • Falta de apoyo social
  • Falta de colaboración entre compañeros en tareas complementarias
  • Proceso de contagio social del burnout

FACTORES INDIVIDUALES

  • Sensibilidad emocional alta y necesidad de los otros
  • Alto grado de idealismo
  • Alto grado de empatía
  • Baja autoestima
  • Dedicación al trabajo
  • Elevada autoexigencia
  • Reducidas habilidades sociales
  • Tendencia a la sobre implicación emocional
  • Patrón de conducta de tipo A

Además, entre otros, sobrecarga de trabajo y/o ocupación poco estimulante, poca o nula participación en la toma de decisiones, falta de medios para realizar la tarea, excesiva burocracia, pérdida de identificación con lo que se realiza, percepción de que no se recibe refuerzo cuando el trabajo se desarrolla eficazmente, pero sí se puede producir castigo por hacerlo mal y/o baja expectativa de qué hacer para que el trabajo sea tenido en cuenta y valorado como merece.